'CARLOS, YA MORISTE, DEJA DE MOLESTAR'

               

Por: Bernot Berry Martínez    (bloguero)

 

  El cadáver del criminal y ladrón, ‘socialdemócrata’  por conveniencia, el ex presidente Carlos Andrés Pérez, aún sigue sonando en los medios informativos. Este politiquero todavía continúa molestando hasta después de muerto.  Y todo por culpa de una familia dividida por repartirse la gran fortuna que él robó al país venezolano sin que las autoridades lo reclamen, vuelva al seno del patrimonio nacional.

   Es algo que no nos explicamos. Un hombre que tanto daño le hizo al humilde pueblo por muchísimos años desde antes de llegar a la presidencia, cuando fue Ministro del Interior de Rómulo Betancourt y lanzaba a los enemigos del régimen desde helicópteros, sigue en la palestra pública, todo porque sus familiares no se ponen de acuerdo sobre la repartidera del dinero hurtado a la nación de Venezuela.   

    Volvemos a insistir que no estamos entendiendo cuanto está sucediendo con todo esto. Un juez yanqui dictaminó congelar el cuerpo del politiquero mientras su familia llegue a una conclusión. Tampoco nos explicamos ¿qué le pasa al bocón de Chávez que no ha lanzado sus poderosas bravuconadas pidiendo ese dinero de los venezolanos, callando esa vagabundería? ¿Se lo dejará para que lo disfruten los nietos del politiquero ladrón y asesino? Eso es una forma de complicidad.  

    Dice el refrán popular que él que calla otorga. Y Chávez no ha dicho nada. Parece que al actual mandatario venezolano no le importa mucho la inmensa fortuna robada. ¿Acaso quiere respetar a los muertos para que sus numerosos enemigos no lo ataquen? Si esto es así estamos mal para la foto. Y pensar que por menos de eso Chávez se tragaba los vientos con su poderosa voz de oficial bocón, perseguidor de guerrilleros por toda Venezuela, incluyendo Colombia, dicho por él mismo. ¿A cuántos combatientes por la Libertad habrá eliminado? Él fue un militar de infantería, de carrera. En Colombia hay miles de guerrilleros encerrados como animales, recibiendo variadas clases de humillaciones y torturas. Algunos tienen años de encierro. Parecen escorias humanas. Los sueltan cuando los médicos militares saben que durarán poco tiempo. Y la gente de la FARC soltando a prisioneros agarrados combatiéndolos. Lo hacen por humanidad. Y sin embargo los otros, esos militares colombianos, reaccionarios, jamás contribuyen a la paz. Lo de ellos es matar de un tiro a la cabeza a cualquier guerrillero que cae en su poder. Solamente dejan vivos a los jefecitos por cuestión de lógica.  ¡Qué malos son, carajo, esencialmente el actual presidente títere de los yanquis, un tal Juan Manuel Santos.       

    Pues bien, Venezuela tiene actualmente una inmensa bonanza petrolera que les deja miles de millones de dólares. No obstante es un país con una altísima inflación, con gente pasando grandes necesidades, porque la corrupción marcha galopante y en ascenso asombroso. El pobre Chávez no se imagina cuántos ladrones se hallan a su alrededor sonriéndole y aplaudiéndole. ¿Acaso están guardando las apariencias por si se voltea la tortilla y todo quede como ha pasado con el caso del ladrón y asesino de Carlos Andrés Pérez?  

    ¡Ya nada nos sorprende!

    Empero, igual que el árbol descansa mientras el hacha va y viene, ¡que viva por siempre la Libertad de Expresión y el Periodismo Independiente! 

 

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