'DANILO, NO JUEGUE CON FUEGO'

 

Por Bernot Berry Martínez (bloguero)

El Sr. Pdte. de la Rep. Dom., Lic. Danilo Medina Sánchez, debe lo más rápidamente posible, hacer cumplir el llamado Código de Ética a todos los funcionarios de su gobierno o de lo contrario él, desafortunadamente, se irá al zafacón de la historia como se han ido la mayoría de los mandatarios que hemos tenido, exceptuando a don Juan Bosch.

Es una lástima que ciertos funcionarios se rían de su interés por realizar un gobierno justo para los millones de infelices damnificados que poseemos por todas partes.

Danilo se comprometió ante la tumba de don Juan a continuar en lo posible el gobierno del 1963. Sin embargo, a Danilo se le olvidó que está rodeado de individuos que solamente piensan en sus intereses personales y para nada en los del pueblo humilde. Y si no hace nada contra ellos, en la burla que cometen, entonces los que andan a pie podrían alzarse contra el gobierno que muchos de ellos eligieron, pues todo cansa en la vida, y el vaso se rebose al aguantar tantos abusos.

Sr. Pdte., usted tiene una gran oportunidad de abrasarse con la gloria si actúa contra esos bandidos funcionarios suyos que se han puesto enormes pensiones, cual es el caso de Ng. Cortiñas y muchos de sus subalternos, asimismo otros más de distintos ministerios. No defraude al pueblo, Sr. presidente.

Lo anterior es un gran abuso contra nuestro país, el que sufre una crisis poderosa de la cual dudo mucho que podremos salir con gente de esa naturaleza. Danilo, quíteles las pensiones, cancélelos y mándelos a la justicia como pide el pueblo. No importa que sean sus compañeros de partido, el PLD, acabe con esas escorias que a menos de mes y medio ya están carcomiendo los cimientos en los cuales quiere usted levantar su gobierno.

Bueno, si no lo hace, si todo queda igual, váyase preparando para recibir candela por todas partes de un pueblo harto hasta el extremo de los abusos de tantos gobiernos de sinvergüenzas, ladrones, delincuentes de cuellos blanco, con dinero robado a un pueblo muerto de hambre, analfabeto, desempleado, sin futuro, que añora volar como grandes aves para marcharse lejos, a donde no regresan jamás los muertos en vida.