Quien Anda a Pie no es Gente
Por: Bernot Berry Martínez
Cuando una persona de a pie camina sobre las desastrosas calzadas de Macorís, principalmente por el llamado Centro de la “ciudad”, se va encontrando con numerosos obstáculos que le dificultan el libre derecho que posee de andar sin los tantos problemas con los cuales debe lidiar para seguir su curso. Cierto, él debe cruzar por entre rabiosos motoristas que están encima de las aceras, con diferentes talleres que las ennegrecen, de relojeros, de vividores religiosos, con zapateros, fruteros, asimismo con variados pedigüeños que parten el alma, con malolientes dementes y con frituras de olor penetrante que lo dejan enajenado, etc.
Claro, el peatón es un infeliz que regularmente no tiene en qué caerse muerto. Es por eso que las autoridades, todas poseedoras de tremendas ´yipetas´, no se preocupan ni un poquito de cuanto pasan cuantos andamos a pie, porque no se desplazan así, sino en sus lujosos vehículos con los vidrios ahumados y subidos. Es un fenómeno que se cumple cabalmente, de forma perfecta, desde hace años, porque todas son iguales, no existe diferencia. Y ellas se transportan rápido como para no ver a quienes van caminando por esas aceras en mal estado, con hoyos por todas partes, hasta sin las tapas de los alcantarillados. Es una barbaridad. A veces tienen la cachaza de decirte dizque te saludaron, pero que no le correspondiste porque te estás volviendo parejero. Y uno debe sonreírle porque no puede efectuar otra cosa para evitar un infarto.
¡Caramba, qué hipócritas son los politiqueros! No obstante, aunque ni siquiera pueden imaginárselo, ignoran que el pueblo lo aguarda en la bajadita. Entonces será el crujir de dientes y esos lamentos que alcanzarán el Cosmos. Y es que las denominadas organizaciones mal llamadas PRD, PRSC y PLD, son la misma vaina. Son grupitos de sinvergüenzas que se unen para estafar, hacerse millonarios mientras el humilde pueblo está repleto de necesidades.
¡Claro, con razón ellos afirman que quienes andan a pie no somos gente! Y me veo en la obligación de preguntarles: ¿Qué somos, entonces? ¿Extraterrestres? Sin embargo, un consejo les dejo a los caminantes, que son la mayoría, lean, analicen, pues sin educación los países no marchan lejos, y tampoco los pueden engatusar los politiqueros como les hacen ahora. Igualmente no dejen que los sigan cogiendo de pendejos, tengan dignidad, no voten por esos sujetos. Deben creerme, entre ustedes lentamente se está desarrollando un Movimiento Social que barrerá por siempre a los individuos de cuellos blancos. Entonces tendremos Patria.
Lector ojalá hayas tenido el valor de llegar hasta aquí, ya que nuestro peor mal es que no leemos, haciéndole ese gran favor a los politiqueros.
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